LA MIRADA HOSTIL

 

 

El parque es el eje alrededor del que gira el barrio en el centro de la ciudad, y en él confluyen a diario infinidad de destinos: los de turistas y paseantes, estudiantes y barrenderos, indigentes y animales. En medio de este microcosmos, Alberto, un anciano cuya mujer desapareció de manera inexplicable, busca a alguien que remedie su ausencia en cierta medida; David, informático y padre, protege a su hijo pequeño con celo aprensivo, perseguido también por una pérdida irreparable; Esther, bibliotecaria con un tortuoso pasado a cuestas, alberga una carencia que no logra colmar.

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Son tres personas traumatizadas que desean, cada una a su modo, dejar atrás sus sentimientos de culpa, resarcirse del sufrimiento que arrastran y establecer alguna clase de sintonía con el prójimo. Pese a que en apariencia no tienen nada en común, sus obsesiones acabarán entrelazándose y transformarán sus respectivas realidades al coincidir en el entorno del parque, bajo cuyos cimientos yace desde hace tiempo un secreto insondable.

 

Por medio de un estilo preciso e implacable, La mirada hostil propone un tenso relato que se va armando desde distintas perspectivas y se adentra en miedos que pocos se atreven a confesar.

 

 

Eduardo Iriarte (Pamplona, 1968) cuenta en su haber otras cinco novelas, entre las que destacan Sombras lentas que caen, galardonada con el XXIX Premio Gabriel Sijé; Más allá de la fragua, XI Premio Francisco Umbral; y Las huellas erradas, que se hizo acreedora del III Premio Logroño de Novela.

Afincado en Barcelona, compagina su faceta de escritor con la de traductor literario, lo que le ha permitido verter al castellano obras de autores como Tom Wolfe, Philip Kerr, Gore Vidal, John Ashbery, W. H. Auden, Charles Bukowski o Walter Mosley, entre muchos otros.

 

 

ENTREVISTA

 

La mirada hostil, ¿el título es ya una declaración de intenciones?

—Sí, esta novela nace de la observación a media distancia. Todos estamos acostumbrados a hacernos una idea inmediata de quién es el prójimo casi a primera vista. En ocasiones nos jactamos de saber identificar al otro en apenas unos segundos. Especialmente en zonas urbanas y superpobladas, la primera impresión suele ser la que queda y decide en buena medida cómo discurrirá nuestra relación con alguien nuevo. La mirada hostil indaga precisamente en los equívocos y malentendidos que pueden generar esas nociones concebidas en poco más que un golpe de vista. Y en cómo una primera impresión errónea puede tener consecuencias impredecibles.

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—¿Por qué el parque como telón de fondo?

—Mi objetivo era situar a personas de algún modo incompletas, desubicadas por el trauma, en un entorno poco acogedor que las obliga a convivir, a rozarse casi, sin llegar a establecer sintonía. En lugar de permitirles bajar las defensas, el ruido de la ciudad, su constante ajetreo, las lleva a trabar relaciones más basadas en los propios miedos y en las conjeturas equivocadas que en la realidad de su interacción con el otro.

 

—¿Es el trauma el motor de la trama?

—Lo más apasionante de narrar es poder entrar en cabeza ajena, ponerse en el lugar del otro, por distinto y lejano que sea, y descubrir qué motivaciones ocultas lo llevan a cometer actos que a primera vista podrían parecernos inexplicables y totalmente absurdos.

 

—Y los fantasmas…

—A los ojos de ciertas personas, siempre puede haber espectros al acecho, incluso en los lugares más transitados y en apariencia inocuos: las bibliotecas, los mercadillos, el parque cercano a tu casa.

 

Editorial Sapere Aude

 

 

LA CRÍTICA HA DICHO

SOBRE LES ANTERIORES NOVELAS DE IRIARTE:

 

«Se percibe que el autor ha traducido a grandes poetas, mantiene un fraseo elegante, un estilo muy cuidado, y describe momentos de gran belleza plástica.»

José Manuel Caballero Bonald

 

«Iriarte transita por los instintos humanos más bajos y deja un amargo poso que merece la pena.»

La Vanguardia

 

«Una novela de misterio que arrastra de principio a fin, pero también una incursión en las sensaciones que genera el miedo en víctimas y verdugos.»

Diario de Noticias

 

«Una muy elaborada, compleja y muy bien conseguida estructura en la que se va mezclando el mundo real con el mundo de ficción.»

El País

 

«Una novela sobre la mentira, un proceso de focalización de gran pulso narrativo.»

Deia